jueves, 20 de noviembre de 2014

Tupí, proyecto libre de animación bidimensional

El campo de la animación en dos dimensiones no podemos decir que sea muy fértil en lo que a GNU/Linux se refiere. Lo más eficaz se llama Synfig Studio y ya lo tratamos en una entrada anterior así que los productos parecidos que encontremos siempre van a suponer movernos en terrenos más rocosos en los que conseguir resultados será más difícil. Pero esto no significa que no podamos sacar partido de lo que hay, así que por este motivo merece la pena echarle un vistazo a Tupí.

Estamos ante un programa de animación 2D con un aspecto bastante naif, como si hubiese sido pensado para la creación de dibujos animados. En seguida pienso en Synfig pero una rápida ojeada me revela que nos quedaremos algo lejos del sucedáneo para Linux de Flash.


Tal es su simplicidad que no tardamos en empezar a crear objetos y otorgarles movimiento mediante la herramienta Tweening. Esto juega en su contra de cara a los usuarios más avanzados pero créanme que es la imaginación la que le puede sacar partido de un software como este más que la sobreabundancia de paletas y menús. Luego podremos exportar nuestras animaciones a diversos formatos como GIF, AVI, MPEG o MOV entre otros. Y si queremos dibujar de forma más compleja podemos hacerlo en Inkscape y después importar a Tupí el archivo SVG de aquel programa de diseño vectorial. Combinar ambas herramientas multiplica las funcionalidades y los resultados.

La verdad es que uno se hace rápido con Tupí así que lo mejor es que lo instalen desde los repositorios con el querido apt-get (o aptitude) y lo comprueben por ustedes mismos. Eso sí, les aviso que está en fase beta y que puede hacerles alguna trastada en forma de cierre súbito o ignorando sus intentos de exportación (mi primera animación no he conseguido sacarla en GIF, por ejemplo, aunque sí en AVI). Pero este es un proyecto que resulta simpático y cuya evolución futura debería ser tenida en cuenta para todo aquel amante del diseño y el software libre.

lunes, 3 de noviembre de 2014

Wings3D, un 3D en construcción

Cada vez me cuesta más encontrar nuevas (o viejas) aplicaciones con que alimentar esta bitácora. Todo el CAD del que podía hablar ya ha sido mencionado, y las utilidades de diseño vectorial que aún podría citar son de menor enjundia que las que ya han pasado por aquí. De tal modo, y tratando siempre de ofrecer productos que, en mayor o menor medida, sean aprovechables para el usuario nos encontramos hoy con Wings3D, un programa de modelización de mallas tridimensionales.

¿Y por qué digo "en construcción"? Porque tengo la impresión de que este software está aún muy verde a tenor de la cantidad de veces que se me ha colgado en mi Debian mientras trataba de progresar con él. Es encomiable que los programadores pongan gratuitamente a disposición del usuario herramientas que intenten rivalizar con los tradicionales productos de pago, y es algo por lo que siempre obtentrán mi reconocimiento. Pero, lógicamente, si hablamos de Wings3D tenemos que admitir que, hasta que la versión disponible sea estable, no se puede contemplar como una alternativa seria.


Como ya me ha pasado en ocasiones anteriores acerca de productos similares, observo mucho potencial en Wings3D, a pesar de que solo trabaje con mallas poligonales y carezca de un buen renderizador. La creación de primitivas en sencilla empleando el menú del botón derecho del ratón, a través del cual también accedemos a las herramientas de edición. Como pasa siempre, echo de menos la practicidad de otros programas a la hora de desenvolverme con los elementos creados, pero sería solo cosa de acostumbrarse.

El interfaz es muy sencillo, con una sola ventana de trabajo, y se aprecia la simplicidad característica de las aplicaciones pequeñas, pero ello no deriva en que podamos alcanzar resultados de manera rápida. No me queda nada claro como aplicar texturas, por ejemplo, durante el rato que lo he testeado. Y eso que está muy lejos de la exuberancia de Blender en cuestión de menús y paletas de herramientas. Me gusta en cambio la facilidad con que el modo selección nos deja elegir entre punto, arista, cara o malla. Simple y directo. Por contra, me disgusta profundamente que sea incapaz de salir del modo "Esculpir", potente herramienta que permite deformar la malla interactivamente pero que apenas cuenta con opciones de control, de otro modo que a golpe de xkill (es decir, matando el proceso desde consola), pero no he visto alternativa.

Los formatos de trabajo que admite van desde el .3ds del antiguo 3D Studio hasta formatos como Illustrator, Wavefront y Lightwave entre otros. No adelanto grandes resultados en las importaciones según mi corta experiencia intentándolo con un fichero 3ds. En fin, merece la pena echarle un vistazo aunque solo sea para comprobar hacia donde caminan los proyectos de software libre orientados al diseño 3D.